Música Para Las Penas
Pintadas rojas en la pared,
nada había que perder.
El eco lejano de un tren
me habla de alguien que se fue,
que se fue.
Aquel que oyó cantar a Rita,
que vio a la cabra Margarita,
y que también supo hacer
que tu corazón latiera fuerte,
latiera fuerte.
Pintadas rojas en la pared
no hay nada mejor que hacer.
Condenas que no son de un juez,
las que más van a doler,
a doler.
Cazando las moscas al vuelo
aprendí hacia donde sopla el viento,
ahogué mis sentimientos
y dejé pasar el tiempo,
pasar el tiempo.
Supongo que te has dado cuenta,
es música para las penas.
Calmará la fiera que hay dentro de mí,
y mi tristeza, y mi tristeza,
y tu tristeza, y tu tristeza,
nuestra tristeza.
