El viejo Matías


Imprimir canciónEnviar corrección de la canciónEnviar canción nuevafacebooktwitterwhatsapp

La lluvia y el viento eran dos hermanos
corriendo furiosos por el terraplén,
y en un banco oscuro, mojado y mugriento
él se acomodaba su uniforme gris.

El viejo Matías duerme en cualquier parte,
un fantasma errante le toca la piel,
pero cuando llueve sus despojos buscan
la estación de chapas de Paso del Rey.

Es cuco de niños y de no tan niños
su figura triste cruzando el andén,
porque nadie ha visto sus ojos cansados
la cruz del olvido temblando en sus pies.

A veces murmura cosas incoherentes,
habla de la guerra, imita un cañón,
y otras veces pone en sus ojos un niño
y acuna en sus brazos un bolso marrón.

Cuando llegan trenes cargados de obreros,
se pone contento, brilla su mirar,
gorrión de la tarde quiere hablar con todos
y después se queda solo en el andén.

Se queda mirando las vías vacías,
la luz que se pierde del tren que pasó,
y después se aleja murmurando cosas
el viejo Matías, ogro del lugar.

La lluvia y el viento eran dos hermanos
corriendo furiosos por el terraplén,
y en un banco oscuro, mojado y mugriento
él se acomodaba su uniforme gris.


Autor(es): Víctor Heredia