La Màlaga

El corral de los gansos


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Cada mañana tengo yo un sentir
un despertar, rápido y ansioso
y me pregunto que yo hago al vivir
en esta jaula de grillos ambiciosos

Todo consiste en ser firme y sonreír
atento y servil, en la dependencia
y no dudes a decir a todo que sí
para seguir y vencer la competencia

Si no puedes despertar, nunca vas ha cambiar
las cadenas que te atan a esta absurda realidad
y mira más allá del cerro, donde puedas alcanzar,
si ves al final la meta, solo acabas de empezar

Mira más allá a lo lejos
no todos somos borregos
y a los que callan por dinero
sin esmero, sabrán
que no nos cambiarán
no todos somos borregos
y a los que callan por dinero
sin esmero, sabrán

Pasan las horas sin ver la luz del sol
ya pierdo la razón y me escuecen los ojos
cada latido de mi triste corazón
no encuentra sitio en este lugar de bobos

Si me permiten yo les voy a comparar
este "guirigay", de listos bien peinados
con un inmenso y fantástico corral
dónde los gansos viven bien alimentados

Si no puedes despertar, nunca vas ha cambiar
las cadenas que te atan a esta absurda realidad
y mira más allá del cerro, donde puedas alcanzar,
si ves al final la meta, solo acabas de empezar

Mira más allá a lo lejos
no todos somos borregos
y a los que callan por dinero
sin esmero, sabrán
que no nos cambiarán
no todos  somos borregos
y a los que doman por dinero
sin esmero, sabrán

Si no puedes despertar nunca vas ha cambiar
En el corral de los gansos están todos los financieros
y aquel del cuello más largo es el que te roba el dinero

Si no puedes despertar nunca vas a cambiar
No hay ni gota de piedad en el corral de los gansos
Hay quien lleva buenos trajes para que otro vayan descalzos

Si no puedes despertar nunca vas ha cambiar
También los hay gallinas, que se creen cosa fina
por una raya de pienso, venden su madre, su hermana y su tía

Si no puedes despertar nunca vas a cambiar
Y es que mira que los hay burros que cargan piedras a leguas
y desean ser caballos para montarse lindas yeguas

Si no puedes despertar nunca vas a cambiar
Sin temor al lobo feroz campean los tres cerditos
Si pasas por el despacho los verás bien sentaditos

Si no puedes despertar nunca vas a cambiar